Ser padre
Esta reflexión es super personal y cada persona lo vive de una manera diferente. En mi blog he escrito muy poco (o nada) sobre ser padre. Ser padre es uno de los mayores retos que he vivido pero, sorprendentemente, el que menos nervioso me ha puesto antes de afrontarlo.
Cuando eres padre entras en una dinámica de cambio lento pero constante. Tu vida, tu día a día, pasa a ser el día a día de la familia, haciendo un pack. Porque tiempo para uno mismo, como padre, queda bastante poco al final del día. En definitiva, en una sociedad donde el individualismo y «estar empoderado» es importante, ser padre consiste en entender el sacrificio, aceptarlo. Incluso para aquellos padres que por suerte cuentan con una capacidad económica como para contar con ayuda, el sacrificio consiste en hacer ese esfuerzo económico que en condiciones normales invertirías, por ejemplo, en ti mismo. Y hay otro sacrificio que hacemos todos los padres sin excepción: El tiempo. Si quieres disfrutar de tus hijos, tienes que invertir tiempo en ellos.
Y empiezas a encontrarte cosas como «12 cosas que debes decirle a tus hijos todos los días». Y que quería reflexionar sobre esos 12 puntos:
- Te quiero mucho
Yo es algo que les digo mucho. De hecho, descubres una nueva dimensión sobre lo que es querer en cuanto eres padre. Descubres el esfuerzo que hicieron tus padres por hacerte crecer, lo que deben sentir en cuanto se convierten en abuelos y ven el resultado de «lo que han creado», como suele decir mi madre. - Confío en ti
Esto me he dado cuenta que yo no lo digo mucho. O que, a lo mejor, debería decirlo más. Incluso cuando nos enfadamos, podemos caer en minar esa confianza. Cuando no les dejamos que hagan, y aprendan, cosas por su cuenta. - Eres la alegría de mi vida
Esto no solo hay que decirlo, tienen que percibirlo. Cuando, como padres, nos saturamos y decimos «no seas pesado», «me tienes harto», estamos dándoles justo el mensaje contrario. - Nadie es perfecto, todos cometemos errores
Muy importante. Que aprendan a ser resilientes. Incluso que nosotros, que somos sus primeros héroes, su principal referencia también nos equivocamos. Muchísimo. - Sigue intentándolo y será más fácil
En casa solemos decirlo de otra manera: «si no lo intentas, no te saldrá». Incluso ellos se dan cuenta de esto cuando te dicen «es que a ti te sale muy bien», y yo respondo «porque lo he hecho muchas veces». - Siempre podremos resolverlo
Esto lo entiendo como la otra parte de la confianza. La confianza debe ser mutua para que funcione. Si confío en ti, es porque espero que te comportes como quiero, por tanto tu debes confiar en que lo que yo quiero es bueno para ti y, por tanto, para ambos. Y confiar en que, pase lo que pase, podremos resolverlo juntos. Confía. - Siempre estaré aquí para ti
Más confianza. Incluso cuando la vida decida que ya he tenido suficiente, el recuerdo se mantendrá vivo y hará que estemos ahí siempre para nuestros hijos. - Escucha a tu cuerpo
El cuerpo es sabio, pero en el caso de mis hijos (5 y 7 años en el momento de escribir estas lineas) su cuerpo todavía no está formado completamente. Y en lo que a necesidades básicas, manda señales mixtas y, creo, no saben interpretarlas correctamente. - Recuerda, se gana o se aprende
Como atlético que está trasladando a sus hijos esta pasión (o esta locura, según se mire), no paro de repetirles que lo importante no es ganar, ni el resultado, lo importante es el aprendizaje que hay en cada fase. Ganemos o no. Porque en la vida no se gana siempre y, lo más importante es saber levantarse, saber aguantar el chaparrón cuando toca. - El mejor momento para ser feliz es ahora mismo
Esta frase es ideal para niños, para su infancia. Pero también tienen que aprender a lidiar con el duelo, con la tristeza. - Los sueños nunca deben ponerse por delante de nuestros miedos
Esto he tenido que leerlo varias veces. Normalmente la he escuchado al revés, es decir, que superemos el miedo para poder alcanzar nuestros sueños. Si ponemos nuestros miedos por delante de nuestros sueños, estos nos impedirán alcanzarlos. Podemos pensar que para alcanzar nuestros sueños tenemos que aprender a gestionar nuestros miedos, por eso el «ponerlos por delante», digamos, para vencerlos, para no olvidarnos de ellos. - La vida es un espejo, por tanto, si sonríes, la vida te sonreirá
Todos sabemos que no siempre será así. La vida tiene luces y sombras. Momentos dulces y momentos complicados. La clave es aprender que esas sombras, con una sonrisa y actitud positiva, son un poco menos oscuras.
Y termino con una frase que me dijo un amigo, padre de dos también, un poco más mayores que los míos:
No te preocupes, están hechos para durar
Jose (Albedrío, Trasteo, Kulto, La Parda…)
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