Creatividad, trabajo y curiosidad
1. f. Facultad de crear.
2. f. Capacidad de creación.
De creativo e -idad.
Siempre he sido una persona curiosa. Y siempre he estado convencido de que esa curiosidad me ha ayudado a ser creativo. Ahora creo que «crear» y la «creación» es un concepto tan amplio, que lo que siempre he visto como creatividad, solo abarca una parte.
Creatividad en el diseño
Ser creativo como diseñador es básico. Pero cuando estás diseñando todo el día y varias cosas «a la vez» cuesta tener ideas. Por eso muchas veces, sin una idea clara, busco como punto de partida (yo personalmente lo llamo «rampa») una inspiración. ¿Estoy copiando? Bueno, como decía Nas ya en 2001:
No idea’s original, there’s nothing new under the sun
Nas – No Idea’s Original – The Lost Tapes
It’s never what you do, but how it’s done
Y lo clava, además de por todo el sentido de esa canción, porque es muy difícil ser el creador de ideas originales, sin embargo coger una idea y hacerla bien es lo importante.
Para recoger ideas y tendencias, llevarlas a un proyecto y desarrollarlas ya con mi estilo, siempre he navegado, realizado benchmarks (hasta cuando nadie los llamaba benchmarks), investigado, leído… Hacía cherrypicking de cosas que me llamaban la atención y lo ponía todo «en la batidora».
El problema surge cuando empiezas a perder fuentes de inspiración. Esto es curioso porque antes, cuando el SEO no era un arte, y se utilizaban varios navegadores para una misma búsqueda y recibir diferentes resultados, encontraba webs muy diferentes, mantenía mis bookmarks y la gente creaba más contenido diferente. Había un porcentaje de creatividad bastante elevado, por decirlo de alguna manera.
Actualmente, encorsetados en redes sociales y sus algoritmos, es más complicado encontrar contenido creativo de un espectro más amplio. El SEO ayuda a mostrar casi siempre las mismas páginas y la gente es creadora pero dentro de los límites de otros. Y se nota mucho.
Creatividad como «hambre»
Otra cosa que defiendo es que los cambios impulsan la creatividad. Lo llamo «hambre» porque cuando uno tiene hambre, tiene que buscarse la vida para satisfacer esa necesidad básica. Y cuando entras en procesos de cambio importantes (esas puertas que se cierran) te buscas la vida, a la fuerza.
Por ejemplo tras un despido. Si, me ha pasado. Me han despedido, y he tenido que replantearme cosas. Empiezas con el CV. Portfolio. Investigar. Pedir feedback en entrevistas. Y a partir de ahí ir modificando todo para que tu perfil sea más fácil de consultar para un recruiter, destacar las cosas importantes, dejar en segundo plano lo menos relevante… Y con ese proceso de mejora constante, como si fuera un proyecto en sí mismo, considerando al reclutador tu usuario y a tí mismo como el proyecto a vender, consigues avanzar en los procesos de selección.
También en proyectos «startuperos», donde la pasión por el proyecto te mueve, y te motiva la creatividad. He estado involucrado en proyectos así de muchas clases: B2B, Dashboards de análisis de negocio, modelos de lenguaje y, más recientemente de un modelo de Visión Artificial con deep learning. Y en todos «aprendes» cosas nuevas, lo que te lleva2 a crear nuevas ideas, algunas se pueden desarrollar, otras acaban perdidas… Pero la creatividad se mantiene en un nivel de trabajo alto.
La creatividad también se trabaja
Como diseñador, he sufrido momentos de cero creatividad. Nada. Ni una sola idea. Y he tenido que buscar inspiración, como decía antes, en referencias a proyectos que nos pueden resultar atractivos, similares o que estén «de moda». Pero, siempre que he vivido los momentos más «inspirado» de mi vida, ha sido porque he curioseado y cogido referencias que luego me han ayudado.
Entonces, las referencias que escogemos para «cultivar» nuestra creatividad son claves para luego el desarrollo de la misma. Por poner un ejemplo: Si diseñas aplicaciones empresariales y solo te dedicas a jugar a videojuegos, vas a conferencias, exposiciones y otros eventos de videojuegos, todos los impactos visuales, tipografías, interacciones, contenido y arquitectura de la información que estarás viendo no será muy útil para el entorno laboral. De todo puedes coger ideas y referencias, pero el camino será más complejo.
Dentro de eso, tener referencias variadas no es un problema, incluso dedicar un pequeño porcentaje a cosas que no tienen nada que ver con tu profesión es muy útil. A mi personalmente me gusta tomar como referentes tanto clásicos como artistas desconocidos. Tratando de desentrañar, poner el foco, en aquello que creo me puede servir tanto de unos como de otros. Y añado a mi inspiración, ahora mismo, mucha lectura de un tema que me apasiona, que es el funcionamiento del cerebro.
No solo los diseñadores son creativos
Hay mucha gente que dice «yo no soy nada creativo» o «a mi no se me ocurren estas cosas». Y creo que hay gente que puede tener más facilidad para recurrir a su creatividad. Pero la creatividad no es exclusiva de diseñadores o artistas. Para muchas otras profesiones necesitamos ser creativos. Lo veo como lo que se conoce como «Problem solving».
Los perfiles que, en su trabajo, tienen que afrontar la resolución de problemas, incluidos los personales, tienen que recurrir a su capacidad creativa para encontrar esas soluciones. Incluso si trabajas solo con datos, en el momento en el que tengas que elaborar un informe, tendrás que encontrar la manera de hacerlo lo más intuitivo y entendible. Y si eres comercial, descubriendo argumentos de venta a través de las necesidades de tus clientes que puedas casar con los beneficios y propuesta de valor de tu producto. Aunque no lo parezca, eso también es creatividad.