
El regreso del marketing físico en 2025
Durante años, el marketing digital ha monopolizado las estrategias de captación de atención. Algoritmos, redes sociales, automatización… Parecía que todo ocurría en la pantalla. Pero, en 2025, algo ha cambiado: los usuarios quieren volver a sentir. Buscan experiencias tangibles, impactos visuales reales y espacios donde la marca no solo se ve, sino que se vive.
Y es ahí donde resurgen con fuerza los formatos de marketing físico, especialmente en entornos urbanos. Ya no hablamos solo de carteles estáticos, sino de elementos más sofisticados, como el alquiler de tótem para eventos, ferias y espacios comerciales, o de soluciones móviles que convierten una simple acera en un punto de contacto directo con el cliente.
Lo interesante es que muchas marcas están descubriendo que combinar lo digital con lo físico no solo genera mayor engagement, sino también una conversión mucho más natural. La gente recuerda lo que toca, lo que ve en tamaño real y lo que les sorprende en su entorno cotidiano.
Del click al impacto real: ¿por qué vuelve el marketing en el mundo físico?
Podemos dividir esta nueva ola en tres grandes motivos:
- Saturación digital: la atención en el entorno online es cada vez más cara y volátil.
- Necesidad de confianza: ver una marca “instalada” físicamente genera seguridad.
- Mejora de la experiencia: los soportes físicos permiten storytelling visual, conexión emocional y presencia constante.
Por eso, muchas marcas han empezado a incorporar estrategias híbridas: colocan elementos visuales en puntos de venta, en estaciones, aeropuertos o centros comerciales, utilizando recursos como las pantallas publicitarias y conectadas, diseñados para cambiar de mensaje o localización con rapidez.
El consumidor postdigital: lo sensorial como valor diferencial
Ya no basta con una creatividad llamativa en una pantalla de 6 pulgadas. El consumidor actual, especialmente en segmentos jóvenes urbanos, busca marcas que actúen en su entorno. Quiere poder verlas, interactuar con ellas, compartir una foto junto a una instalación impactante.
Las experiencias sensoriales –ver, tocar, oler, recorrer– crean un vínculo emocional que es imposible replicar solo con banners o vídeos pre-roll.
Un tótem en la entrada de una tienda, una estructura llamativa en un evento o un expositor que invita a la interacción puede ser el detonante de una compra, de una publicación en redes sociales o incluso de una historia personal que conecte con la marca.
¿Qué hace efectivos a estos soportes físicos en 2025?
A diferencia del pasado, los nuevos soportes físicos son más versátiles, más tecnológicos y más adaptables:
- Diseños modulares y personalizados: adaptables a diferentes espacios, con posibilidad de rotulación rápida y actualizaciones frecuentes.
- Tecnología integrada: pantallas digitales, sensores de movimiento, iluminación LED y sistemas de detección de interacción.
- Montaje y logística exprés: empresas especializadas permiten alquilar, instalar, mantener y desmontar en cuestión de horas.
- Producción sostenible: materiales reciclables, impresiones ecológicas y reutilización de estructuras.
Todo esto convierte al marketing exterior en una herramienta flexible, creativa y rentable. Y el tótem publicitario es uno de sus formatos estrella por su visibilidad vertical, impacto visual y fácil instalación.
Casos reales que inspiran
1. Campañas pop-up en retail
Una conocida marca de calzado deportivo lanzó una campaña de edición limitada instalando tótems y estructuras interactivas en estaciones de metro y centros comerciales. La campaña generó más de 5.000 interacciones físicas diarias y una tasa de conversión superior al 8% en los productos destacados.
2. Ferias y eventos profesionales
En los grandes salones profesionales, las marcas que alquilan expositores personalizables logran destacar entre cientos de competidores. Gracias a estructuras adaptables y señalética bien diseñada, se multiplica la captación de leads y el recuerdo de marca.
3. Comunicación institucional
Ayuntamientos, universidades y centros públicos están utilizando cada vez más soportes como los tótems informativos para campañas ciudadanas, campañas medioambientales o señalética de eventos. No solo refuerzan la imagen institucional, sino que también permiten adaptar mensajes en tiempo real.
¿Qué ventajas tiene el alquiler frente a la compra?
Tanto el alquiler de expositores publicitarios como de tótems u otros elementos ofrece una serie de beneficios clave:
- Coste variable y ajustado a la duración de la campaña.
- Sin necesidad de espacio de almacenamiento permanente.
- Actualización constante en diseño y materiales.
- Flexibilidad logística para diferentes ubicaciones.
- Soporte técnico y mantenimiento incluidos.
Es decir, acceso a tecnología y diseño profesional sin necesidad de hacer una inversión inicial elevada.
¿Qué buscar en un buen proveedor?
Si estás pensando en incorporar soportes físicos a tu estrategia, asegúrate de que la empresa ofrezca:
- Asesoramiento técnico y creativo.
- Portafolio actualizado con casos de éxito.
- Materiales duraderos y sostenibles.
- Capacidad de producción e instalación rápida.
- Servicio postventa y logística.
Hoy en día, algunas empresas líderes en el sector están revolucionando el concepto tradicional de “rotulación” con soluciones completamente integradas en el ecosistema de marketing.
Tendencias a seguir de cerca
1. Experiencias inmersivas 360°
Instalaciones físicas que permiten al usuario entrar, tocar, activar sensores y generar contenido compartible.
2. Integración con datos y CRM
Escaneos de QR, interacciones táctiles, captación de leads: los tótems pueden estar integrados con herramientas de marketing automation.
3. Señalética ecológica e inteligente
Los nuevos materiales biodegradables o reciclables, junto con iluminación solar o sensores de tráfico, permiten que la señalética no solo informe, sino que sea responsable.
4. Storytelling físico-digital
Desde un tótem puedes contar historias visuales que conectan con el móvil del usuario, con una landing, un juego o una app. El offline y el online se entrelazan.
Conclusión
El entorno urbano y comercial de 2025 está más vivo que nunca. Los usuarios no solo hacen scroll, también caminan, miran, tocan y deciden en la calle. Por eso, recuperar el valor del marketing físico no es un paso atrás, sino una evolución inteligente.
Tótems, expositores, señalética o soportes modulares bien utilizados son una vía directa al corazón del cliente. Y si se hace con criterio –apostando por el diseño, la tecnología y la estrategia–, el resultado es una marca con presencia real, emocional y memorable.
Así que si estás replanteando tu estrategia y sientes que lo digital ya no impacta como antes, prueba a salir a la calle. Allí está tu público. Y espera algo que se pueda vivir.